Tiempo

Año nuevo y dicen que vida nueva. Hace dos días celebrando el finde con los amigos y ya estamos casi a mitad del primer mes del año. No sé pero en estos días de inicio de año no paro de repetir la misma expresión..."la vida sigue igual". Vamos que después de un lunes sigue un martes y así sucesivamente.
Puede ser que ya tenemos una edad (dentro de un mes cumpliré 39 tacos) o que vamos quemando etapas de la vida en la que empiezas a conformarte con todo (no quiero decir que todo me da igual) y no te paras ni siquiera a protestar; dar un grito al aire y reclamar lo que es tuyo y de nadie más.
Siento y noto que ahora me toca vivir mirando al tiempo (no al cielo metereológico, después del temporal de estos días) sino al tiempo como magnitud física que mide la duración o separación entre un acontecimiento y otro. Ahora entiendo lo cierto de la frase hecha "el tiempo es oro". Ahora es cuando te das cuenta y lo valoras al cien por cien. Vivo en un sin vivir continuo mirando el reloj, de cuantos segundos dispongo para hacer esto o aquello. Y....reconozco que se quedan muchas cosas en el tintero. Me siento que me falta ese rinconcito para dedicarlo a mi espacio vital, esto es; "mis cosas". No tengo tiempo de nada. Corriendo arriba y abajo siempre con la lengua fuera. La solución es que debo bajar el listón y disfrutar con todas mis fuerzas y todos los momentos del artíficie de mi situación actual: Víctor!!!!
El "petit" diablillo te absorbe las 24 horas del dia y no te deja hacer nada de nada. Todo gira a su alrededor puesto que en estos momentos es el rey de mi casa. Cada dia nos enseña algo nuevo. Reconozco que te lleva a situaciones extremas que pueden contigo, pero sólo con que te devuelva una sonrisa ya te tiene en el bote.
Me toca vivir con calma, pasito a pasito.
A los que ya sois y a los futuros papás un consejo: mucha calma chica.
Nos vemos.