Ansiedad por el ritmo de vida que llevamos. Ansiedad por la resolución del Estatut de Cataluña. Ansiedad por las sensaciones que nos llevan a vivir una final de un Mundial de fútbol (españoles, catalanes, madrileños....todos). Ansiedad por la crisis actual que nos devora poco a poco, dándose la voz de alarma en nuestro sector laboral (más recortes a las farmacias, menos puestos de trabajo). Ansiedad por este calor que no nos deja vivir; ni a grandes ni a pequeños, querer dormir y no conciliar el sueño... sudor, sudor y más sudor. Ansiedad provocada por las malas noticias acerca de la salud de uno de los tuyos. Ansiedad porque las vacaciones no llegan nunca. Ansiedad por no disponer del tiempo necesario o suficiente para poder relajarte, sentirte vivo, tener ese tiempo par ti (Víctor te absorbe hasta más allá del infinito). Ansiedad por querer recortar esos segundos a tu reloj cuando participas en una cursa de diez kilómetros....Ansiedad por el miedo infundado por mantener tu voz limpia e intacta; parálisis, ¿que parálisis?.
En definitiva tenemos que cambiar esta vida o más bien el modo de llevarla porque la ansiedad, estrés o tensión que nosotros mismos nos creamos no nos lleva a buen puerto. Tenemos que respirar, vivir, sentir.
Un grito de viva la vida.
Saludos.
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